4 consejos para guardar correctamente tu e-bike durante el invierno
Si vives en una zona en la que el frío es extremo y te impide usar tu bicicleta eléctrica, es normal que la guardes hasta que las condiciones meteorológicas mejoren. Sin embargo, antes de dejarla olvidada en cualquier rincón de casa o en la calle, debemos tener en cuenta algunas precauciones para no llevarnos un susto cuando llegue la primavera.
Tanto si tu bicicleta es eléctrica como si no, estas recomendaciones te van a venir bien. A continuación, vamos a enumerar algunos consejos que puedes aplicar de forma sencilla en tu lugar de almacenaje durante el invierno o el tiempo en el que no vayas a usar tu bicicleta eléctrica.
Límpiala bien antes de guardarla
Este paso es muy importante y debemos realizarlo adecuadamente. Cuando vayamos a limpiar nuestra e-bike, no podemos hacerlo de cualquier manera, hay que tener especial cuidado con algunos componentes como son la suspensión y la transmisión. Y, además de lavarlos correctamente, también tendremos que lubricarlos.
Si tu bicicleta es eléctrica, tendrás que poner especial atención a la zona en la que va alojada la batería. Lo ideal es que la extraigas para poder limpiar bien el puerto de carga y demás conexiones. En este caso es importante emplear aerosoles especiales para los contactos eléctricos o simplemente un poco de agua con jabón de pH neutro.
En este enlace puedes consultar una guía sobre cómo limpiar correctamente tu bicicleta.
Evita que se moje o se hiele
Si vives en una zona especialmente fría y vas a dejar tu bici en el exterior, es fácil que acabe helándose. Aunque las e-bike están diseñadas a partir de materiales resistentes, no es aconsejable exponerlas a condiciones ambientales extremas. Por lo que, siempre que podamos guardar una bicicleta eléctrica en espacios interiores será mejor para su mantenimiento. Si no tienes suficiente espacio dentro de casa, siempre puedes cubrirla con una funda especial para bicicletas. Para nosotros lo más recomendable es escoger una e-bike plegable y así poder guardarla en cualquier armario de casa.
Mantenimiento adecuado de la batería
Es sin duda el componente con el que más cuidado debemos llevar a la hora de guardar nuestra bicicleta eléctrica. Ya que de su buen mantenimiento dependerá que nos dure más o menos tiempo.
La temperatura ideal para conservar una batería está comprendida entre los 10 y los 20 grados centígrados. También habrá que evitar exponerla a la humedad, la nieve y la lluvia. Si no es posible garantizar estas condiciones óptimas de conservación, lo mejor será extraerla de la bicicleta y guardarla en un lugar adecuado.
Por otro lado, para que la batería no pierda eficiencia durante el tiempo en el que no la vas a usar, tendremos que dejarla cargada al 70% de su capacidad antes de apagar el sistema.
Guarda tu bicicleta en la posición adecuada
Cuando dejes tu bicicleta eléctrica estacionada durante un largo periodo de tiempo, procura que esté siempre en posición horizontal. De esta manera evitaremos que se den fugas de aceite en la horquilla y que se formen bolsas de aire dentro del sistema de frenado hidráulico.
En cuanto a los neumáticos, debemos comprobar que no estén totalmente deshinchados. Con esto evitamos que el caucho se deforme al estar apoyado en el suelo durante tanto tiempo y, que al volver a hincharlos, no podamos recuperar su forma original.
Siguiendo estas recomendaciones conseguiremos mantener en el mejor estado posible nuestra e-bike. Recuerda comprobar el estado de los componentes cuando quieras volver a usarla de nuevo para evitar accidentes y un pedaleo incómodo. Síguenos para más consejos en el Blog de Biwbik.